La última vez que charlamos con Sergio “Maravilla” Martínez fue cuando aterrizaba en su hotel de Fort Lauderdale, Florida, recién terminado el acto del pesaje de su combate con Kermit Cintrón y ahora, 72 horas, después, le abordamos, recién llegado de nuevo a su casa en Alovera, Guadalajara (España).
¿Cuándo llegaste, Sergio?
Hemos llegado hoy, lunes, a las 11 de la mañana, hora española. Salimos de Miami a las 8 de la noche de allí. Llegué fundido, después de dos días sin pegar ojo. Me tiré en el sofá a eso de la 1, y me acabo de despertar a las 9, imagínate el cansancio que traía.
¿Cómo estás?
No pasó nada, tengo que agradecer que nos trajimos el cinturón. Imagínate que los dos jueces de Florida dan 114-113 para él, pues dan ganador a Cintrón y dentro de un mes, nadie se acuerda de la injusticia, ni de robo ni de nada.
¿Se habla ya del siguiente rival?
Allí mismo, le dijo el promotor Gary Shaw a mi manager, Sampson Lewkowicz, que se está empezando a hablar de medirme con Alfredo “Perro” Angulo. No tendría problemas para hacer esa pelea.
¿Saludaste a Angulo?
No, no lo vi en toda la noche, al que sí pude saludar fue a Cosme Rivera.
¿Cómo vives el episodio del séptimo asalto?
Desde el primer momento, me di cuenta, porque hasta sonó el golpe, que le impacté bien, y mira que yo no soy un noqueador. Le cuentan diez, me pongo a saltar como un loco y, de pronto, veo que el árbitro empieza a dudar, toda la esquina de Cintrón se le echa encima a presionarle. Yo me acerco a Cintrón y me dice que ha sido un cabezazo, y le digo:”Mirad el video” y me contesta que no hay nada que mirar, tan convencido que era un cabezazo.
¿Pero quién decide que el combate continúe?
Yo qué sé qué pasó. Alguien, me imagino que de la Comisión de Florida, le dicen al árbitro que ha sido un cabezazo y yo digo “¿entonces, por qué me dan el asalto 10-8? Menos mal que, por lo menos, nos hemos traído el cinturón y ya está en casa.
Pero era una situación de auténtica locura…
Yo me decía “esto no puede estar pasando, tiene que haber alguien que me salve o alguien que me pegue un tiro…(risas)”. Cuando, al final de la pelea, bajé del ring, pensé que estas cosas solo pasan en América.
¿Cómo estaba la gente de tu esquina en el vestuario?
En el vestuario solo había caras largas, yo estaba sonriente y les decía a todos que el cinturón estaba con nosotros. Para ellos fue una bonita experiencia, pero yo prefería no ponerme en su lugar, porque les cayó un “chaparrón”. Ricardo Sánchez Atocha solo me decía que había sido un robo descarado.
¿Hablaste con la gente de HBO?
Sí, tanto Bob Papa, como Lennox Lewis y Max Kellerman, me fueron a felicitar, me dijeron que estaban muy contentos conmigo y que estuviera tranquilo, que había ganado bien, y que esas cosas no deberían suceder.
¿Cómo te encontraste en el cuadrilátero?
No me sentí cómodo. Él solo salió a anularme, era su único planteamiento. Mi estrategia siempre es, primero, cuidar la defensa, y luego, boxear a la contra, pero él estuvo todo el tiempo, a la defensiva.
¿Te lo hubiera puesto más difícil Daniel Santos?
¿Santos? ¿Cómo puedo perder con Santos? Santos no tiene nada. Es campeón y tiene una historia, por tanto, reciente, pero él no tiene nivel para ganarme. Yo no digo que sea mejor Cintrón, pero Santos no es rival, quizás es que me tengo demasiada confianza, pero es lo que pienso.
¿Por qué te resultó la pelea tan incómoda?
Si el rival no te ataca, es más complicado. Él, además, tiene la mano pesada y, con la pelea pareja, tampoco podía ir a la guillotina y arriesgarme a que me cazara.
¿Cómo fue todo entre los dos en el ring?
Nos estuvimos insultando todo el rato, en español, que él habla perfectamente. En el primer asalto, se quejó que le metía los codos. En el segundo, volvió a quejarse, y en el tercero, le dije “deja ya de llorar”. Y, luego, como soy zurdo y él diestro, me pisó una vez, otra, seis veces en el mismo asalto y le dije de todo.
-En los últimos asaltos, tras el suceso del séptimo asalto, exagerabas los gestos de bajar los brazos.
Al final, tenía que provocarle, a ver si me entraba, para meterle la contra, pero se movía lejos, lo que hacía las cosas más incómodas para mí La verdad es que no fue mi mejor noche.
-Pero si se te hubiera dado el nocaut del 7º round, no estaríamos hablando de esto.
Claro, claro, la historia hubiera sido totalmente diferente, porque, además fue lo que en verdad, sucedió.
-Sigues siendo campeón interino, ¿te podrá seguir eludiendo Forrest?
Lo de Forrest es insoportable. Hasta cuándo va a estar dando vueltas…Pero me ha dicho Ricardo que esta semana se anunciará la pelea entre ambos, para finales de abril o principios de mayo, preferentemente, a finales de abril. Y si no accede, este viernes o sábado, habrá noticias por parte del Consejo Mundial. Yo no creo que Forrest pelee conmigo.
-Creo que te ocurrió otra anécdota al final del combate.
Sí, bueno, eso fue tremendo, cuando estoy pasando el control antidoping, viene un señor, y me dice que he dado positivo de no sé qué sustancia. Yo me echo a reír, y les digo “pero si en Argentina, me dicen que soy un “careta”, nunca fumé, nunca bebí y, en definitiva, nunca probé nada ilegal”. Yo, por si acaso, les decía a los míos: “por favor, que no se lleven el frasco de la orina”. Yo me cambié, con un ojo aquí y otro allí, porque no me fiaba, hasta que por fin apareció un médico de la Comisión de Florida y dijo que había sido un malentendido y que les disculpáramos. Yo les dije a todos: “agarramos el cinturón y nos vamos rápido de aquí”.
¿Te comentó algo Don King? Parece que está mayor el hombre…
Yo le vi más vivo que nunca, pero qué personaje…
Sergio “Maravilla” Martínez nos insiste como final, por ahora, que “no fue mi mejor pelea, pero lo mejor fue que nos trajimos el cinturón de campeón del mundo interino del peso superwelter”. Dentro de unos días, por tanto, habrá noticias de ese combate “fantasma” entre Forrest y nuestro simpático y amable interlocutor, natural de Quilmes, y residente en Alovera, provincia de Guadalajara, como él dice “apenas a 25 minutos de Madrid, por eso todo el mundo dice que vivo en la capital”.
¿Cuándo llegaste, Sergio?
Hemos llegado hoy, lunes, a las 11 de la mañana, hora española. Salimos de Miami a las 8 de la noche de allí. Llegué fundido, después de dos días sin pegar ojo. Me tiré en el sofá a eso de la 1, y me acabo de despertar a las 9, imagínate el cansancio que traía.
¿Cómo estás?
No pasó nada, tengo que agradecer que nos trajimos el cinturón. Imagínate que los dos jueces de Florida dan 114-113 para él, pues dan ganador a Cintrón y dentro de un mes, nadie se acuerda de la injusticia, ni de robo ni de nada.
¿Se habla ya del siguiente rival?
Allí mismo, le dijo el promotor Gary Shaw a mi manager, Sampson Lewkowicz, que se está empezando a hablar de medirme con Alfredo “Perro” Angulo. No tendría problemas para hacer esa pelea.
¿Saludaste a Angulo?
No, no lo vi en toda la noche, al que sí pude saludar fue a Cosme Rivera.
¿Cómo vives el episodio del séptimo asalto?
Desde el primer momento, me di cuenta, porque hasta sonó el golpe, que le impacté bien, y mira que yo no soy un noqueador. Le cuentan diez, me pongo a saltar como un loco y, de pronto, veo que el árbitro empieza a dudar, toda la esquina de Cintrón se le echa encima a presionarle. Yo me acerco a Cintrón y me dice que ha sido un cabezazo, y le digo:”Mirad el video” y me contesta que no hay nada que mirar, tan convencido que era un cabezazo.
¿Pero quién decide que el combate continúe?
Yo qué sé qué pasó. Alguien, me imagino que de la Comisión de Florida, le dicen al árbitro que ha sido un cabezazo y yo digo “¿entonces, por qué me dan el asalto 10-8? Menos mal que, por lo menos, nos hemos traído el cinturón y ya está en casa.
Pero era una situación de auténtica locura…
Yo me decía “esto no puede estar pasando, tiene que haber alguien que me salve o alguien que me pegue un tiro…(risas)”. Cuando, al final de la pelea, bajé del ring, pensé que estas cosas solo pasan en América.
¿Cómo estaba la gente de tu esquina en el vestuario?
En el vestuario solo había caras largas, yo estaba sonriente y les decía a todos que el cinturón estaba con nosotros. Para ellos fue una bonita experiencia, pero yo prefería no ponerme en su lugar, porque les cayó un “chaparrón”. Ricardo Sánchez Atocha solo me decía que había sido un robo descarado.
¿Hablaste con la gente de HBO?
Sí, tanto Bob Papa, como Lennox Lewis y Max Kellerman, me fueron a felicitar, me dijeron que estaban muy contentos conmigo y que estuviera tranquilo, que había ganado bien, y que esas cosas no deberían suceder.
¿Cómo te encontraste en el cuadrilátero?
No me sentí cómodo. Él solo salió a anularme, era su único planteamiento. Mi estrategia siempre es, primero, cuidar la defensa, y luego, boxear a la contra, pero él estuvo todo el tiempo, a la defensiva.
¿Te lo hubiera puesto más difícil Daniel Santos?
¿Santos? ¿Cómo puedo perder con Santos? Santos no tiene nada. Es campeón y tiene una historia, por tanto, reciente, pero él no tiene nivel para ganarme. Yo no digo que sea mejor Cintrón, pero Santos no es rival, quizás es que me tengo demasiada confianza, pero es lo que pienso.
¿Por qué te resultó la pelea tan incómoda?
Si el rival no te ataca, es más complicado. Él, además, tiene la mano pesada y, con la pelea pareja, tampoco podía ir a la guillotina y arriesgarme a que me cazara.
¿Cómo fue todo entre los dos en el ring?
Nos estuvimos insultando todo el rato, en español, que él habla perfectamente. En el primer asalto, se quejó que le metía los codos. En el segundo, volvió a quejarse, y en el tercero, le dije “deja ya de llorar”. Y, luego, como soy zurdo y él diestro, me pisó una vez, otra, seis veces en el mismo asalto y le dije de todo.
-En los últimos asaltos, tras el suceso del séptimo asalto, exagerabas los gestos de bajar los brazos.
Al final, tenía que provocarle, a ver si me entraba, para meterle la contra, pero se movía lejos, lo que hacía las cosas más incómodas para mí La verdad es que no fue mi mejor noche.
-Pero si se te hubiera dado el nocaut del 7º round, no estaríamos hablando de esto.
Claro, claro, la historia hubiera sido totalmente diferente, porque, además fue lo que en verdad, sucedió.
-Sigues siendo campeón interino, ¿te podrá seguir eludiendo Forrest?
Lo de Forrest es insoportable. Hasta cuándo va a estar dando vueltas…Pero me ha dicho Ricardo que esta semana se anunciará la pelea entre ambos, para finales de abril o principios de mayo, preferentemente, a finales de abril. Y si no accede, este viernes o sábado, habrá noticias por parte del Consejo Mundial. Yo no creo que Forrest pelee conmigo.
-Creo que te ocurrió otra anécdota al final del combate.
Sí, bueno, eso fue tremendo, cuando estoy pasando el control antidoping, viene un señor, y me dice que he dado positivo de no sé qué sustancia. Yo me echo a reír, y les digo “pero si en Argentina, me dicen que soy un “careta”, nunca fumé, nunca bebí y, en definitiva, nunca probé nada ilegal”. Yo, por si acaso, les decía a los míos: “por favor, que no se lleven el frasco de la orina”. Yo me cambié, con un ojo aquí y otro allí, porque no me fiaba, hasta que por fin apareció un médico de la Comisión de Florida y dijo que había sido un malentendido y que les disculpáramos. Yo les dije a todos: “agarramos el cinturón y nos vamos rápido de aquí”.
¿Te comentó algo Don King? Parece que está mayor el hombre…
Yo le vi más vivo que nunca, pero qué personaje…
Sergio “Maravilla” Martínez nos insiste como final, por ahora, que “no fue mi mejor pelea, pero lo mejor fue que nos trajimos el cinturón de campeón del mundo interino del peso superwelter”. Dentro de unos días, por tanto, habrá noticias de ese combate “fantasma” entre Forrest y nuestro simpático y amable interlocutor, natural de Quilmes, y residente en Alovera, provincia de Guadalajara, como él dice “apenas a 25 minutos de Madrid, por eso todo el mundo dice que vivo en la capital”.
Tomado de Jose Manuel Moreno de Boxeo Veleño.
This entry was posted
on 18:30
and is filed under
AFANO,
Cintron,
Kermit,
Maravilla,
Martinez,
REPORTAJE,
ROBO,
SERGIO,
superwelter,
TRUCHADA
.
You can leave a response
and follow any responses to this entry through the
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
.
0 comentarios